La situaci贸n actual de la econom铆a venezolana no es sostenible en el sin una disminuci贸n del gasto fiscal. Lo anterior por dos razones fundamentales:
1) El gobierno ya enfrenta un d茅ficit fiscal estimado en 16% del PIB.
2) La tan esperada devaluaci贸n del d贸lar , que llev贸 el bol铆var de 4,30 a 6,30 por d贸lar a partir de esta semana, complica a煤n m谩s el control de la inflaci贸n que tan s贸lo en los 煤ltimos dos meses acumula casi un 7% de alza.
A pesar de la devaluaci贸n, el valor del d贸lar paralelo sigue siendo casi tres veces mayor que el nuevo d贸lar oficial de 6,30 bol铆vares. A diferencia de Chile, donde hay libertad total para comprar y vender divisas, con un tipo de cambio flotante y 煤nico para todos, en Venezuela el acceso al d贸lar oficial (ultra subsidiado) es usado por el gobierno para favorecer a sus partidarios pol铆ticos y asfixiar a煤n m谩s a los empresarios venezolanos, que ya casi no pueden competir con las grandes distorsiones generadas por el control de cambio y de precios.
Cada d铆a hay mayor necesidad de importar bienes y servicios para abordar el desabastecimiento que existe, debido a la falta de productividad interna. La principal causa es la pol铆tica del actual gobierno, que pone m谩s trabas que incentivos para el sano funcionamiento del aparato productivo. Incluso el rendimiento de la industria petrolera, el principal sustento de la econom铆a, ha seguido decayendo dada la falta de nuevas inversiones en el sector.
Por otro lado, los fondos de uso discrecional del gobierno tienen al oficialismo gastando permanentemente m谩s de lo que sus ingresos le permiten. Esto se explica por los millones de d贸lares que se env铆an en ayuda internacional a sus aliados pol铆ticos y por los distintos programas de subsidios que se destinan a beneficiar a m谩s de 4 millones de venezolanos que no trabajan. Todo lo anterior ha hecho que la demanda existente sea muy superior a la oferta de bienes, generando altas tasas de inflaci贸n.
Dado que el recorte de gastos no es una medida popular, probablemente no habr谩 mayores cambios en la pol铆tica fiscal hasta que no ocurra algo trascendental.
Actualmente la gran incertidumbre que tiene a Venezuela en un estado de letargo generalizado hace meses es qu茅 pasar谩 ante el eventual anuncio de la falta absoluta de Hugo Ch谩vez, lo que necesariamente gatillar谩 una nueva elecci贸n presidencial 30 d铆as despu茅s de dicho anuncio.